Feliiz 2015

Gracias a los que llegaron este año. Gracias por cada lágrima y apoyo. Gracias por aguantarme y gracias por llegar. Por que necesitamos a la gente que nos rodea, y aunque nunca lo digamos los necesitamos. Necesitamos pasear, hablar, desahogarnos, reír y disfrutar. Y si algo he echo este año ha sido disfrutar. Mil gracias a todos, desde el más hijo de puta hasta mi salvación. Gracias por hacerme disfrutar y sentirme un poco imprescindibles en vuestra vida. Y sobre todo gracias a esas amigas que un día desaparecieron pero hoy por hoy te salvan el culo como nadie.

FELIZ 2015

Y este año quizá ha sido el mejor, digo el mejor por que después de que te fueras no lo he disfrutado y no he vuelto a ser yo. Ostia, si supieras y me vieras me matarías. Me echo un par de cervezas algún que otro día y fumo papá jajajaja hasta un día con mami. Pero despacito y con un poco de control.
Que he conocido a personas a las que pensaba que nunca iba a tener cerca. He ganado más de lo que he perdido en según que cosas. Pero en mi, he ganado y por fin me he llegado a entender.
He perdido a personas que no pensaba que iba a perder y he ganado otras que me han ordenado los esquemas.
He aprendido que nada duele más que tu pérdida y si siguen vivos que vuelvan, yo siempre perdono. Y sobretodo he aprendido a pensar por mi y no a ponerme en tu mente, que al fin y al cabo de eso se trata, de vivir mi vida y a ti llevarte en el corazón.
Feliz 2015, me ha echo fuerte y he superado lo propuesto. Sólo me faltabas tu. Y aunque quiera verte a veces razono y se que no te veré.
Te quiero

Imaginación

Te imagino escribiéndome con tus dedos grandes, mirando a la pantalla con esos ojos Caribe, sonriendo con o sin intención, pero te veo reír en mi cabeza, y suena también decir 'ver' después de haber visto como te ríes a carcajadas que adoro como pierdes tu tiempo en mi. Aunque no te importe la mitad de lo que me importas tu.

Lo que me gusta.

Me gusta que me quieran, que me abracen, que me traten como a una niña y no como a una princesa, me gusta jugar, reírme, estar con mis amigas pero sólo las de verdad, me gusta la fiesta, me gusta que me lleven al espacio con las palabras, me gusta la poesía, me gusta tener que cerrar los ojos en un beso por que lo siento, me gusta la lluvia si estoy con la persona indicada, me gusta decir cosas bonitas, me gustan las métaforas creo que es la mejor forma de definir cualquier cosa, persona o lugar, me gusta echar de menos y me gusta agobiarme, me gusta escuchar pero sobre todo me gusta hablar, me gustan los nervios siempre sacan lo mejor de mi, me gusta correr, andar, pasear y ver la naturaleza. Adoro ir a mi barrio, me encanta pisar mi suelo, conseguir lo que quiero, me encanta esforzarme y sentirme útil, me encanta mentir y hacer sentir que son mejores que yo.Me gusta sentirme una entre mil y que luego solo aparezca yo en tu cabeza.Me gusta fingir que no siento.Me encanta mi escudo, siempre sonriendo. Me gusta ponerme en la situación del otro, empatía es mi mejor amiga. Me gusta pecar y compartir. me gusta tener cerca a la gente que quiero y disfrazarme de cada compañía. Me encanta sentir que muerdo el agua por alguien o que por lo menos que puedo romper el suelo con cada caricia. Me gusta hacer sentir grande a la gente, ayudar y dar los mejores consejos que algún día la conciencia me dió. Me gusta mover la pierna cuando estoy inspirada, acariciar los pies mientras duermo. Me gusta dar mil vueltas a la cama y dormir a mi bola eso si, siempre acompañada y sino me lo invento. Y me gusta sonreir y la gente sonría. Me gusta ser así como soy, alegre y no feliz, por que si algo me enseñó la vida es que la alegría forma parte de ti y que está casi siempre y que la felicidad solo se trata de instantes de y de la compañía. Me gusta tener algo con lo que escribir. Y aunque a veces lo odie, te doy gracias por haberme echo darme cuenta de lo que valgo, lo malo es que ya no estás para verme levantar la cabeza.
Me gustarán tantas cosas mañana...

Sigue mi ritmo si puedes.

Quizás debería hacerlo más de vez en cuando ahora que me siento mejor conmigo misma, ahora que por fin más o menos vuelvo a ser yo. Y aunque sepa que no volverás creéme que es la primera vez que echo de menos a alguien sin que me duela. He aprendido a aguantarme la sed de ti, a valorarte sin tenerte, a olvidarte teniéndote siempre presente. Y aunque el pasado siempre duele para mi no es eso, a mi mi pasado me enseña, y aunqeue a veces me rompa, sé que lo hice lo mejor que pude y siempre lo hice por mi.
Y si algo aprendí en estos casi fatídicos dicinueve años es a quererme y hoy por hoy es lo único que me mantiene.
Aprendí a odiar a cada corazón que pasaba por mi lado, a conseguir las perlas y los diamantes que la vida me ofrecía y me ofrece, aprendí a conocer a la gente, a no ser borde y sobre todo aprendí que la paz se va cuando estás en desacuerdo con el mundo. Que tú te equivocas más que nadie y que de eso se trata la vida, de aprender y de cometer errores, por que si no los cometes nunca sabrás que está bien o qué está mal.
Y ahora nos vamos a otro punto, como el de que no puedo vivir sin ti, que tengo sed de tus labios, y que a lo mejor todo sigue siendo una mentira, pero que más da, te necesito a mi lado, y quiero que vuelvas y que estés. Quiero que me rompas en añicos cuando lo necesites, que llores y que me mientas cuando te duela y creas que me va a doler.
Y prefiero mentir o mentiras antes que doler o que me duela, prefiero un pasado doloroso que un presente que me queme. Prefiero llorar sin tí y sin el, por que se que me hago fuerte con cada lágrima que retengo por vosotros. Prefiero cometer mil errores que no arriesgar y no saber como acaba. Prefiero mil principios malos que un final nefasto. Y sobre todo prefiero la libertad antes que la riqueza, la felicidad antes que el dinero, y alguien con quien llorar y no con quien salir de fiesta.
Adoro despertarme y ser la razón de alguien, el que me recuerden después de años haya echo mal o bien. Me encanta que me miren y me digan que soy increible, que les gusta mi forma de ser y que me conozcan en estado puro.
Y yo queridos, adoro lo que más a la familia, luego escribir, después leer, hablar, ayudar, conocer, reirme, conocerme, psicoanalizar, me encanta conocer los gestos y el por que de las personas, conocer los movimientos, los pasos, los latidos, y cada mirada que me lanzan, me encanta saber que cononzo a la gente, y sobre todo lo que más me gusta es mirar y conocer que hay detrás de esa mirada.  Adoro a cada una de las personas que se disponen a entrar o hablar con alguien, esas agallas y esa motivación no la tiene todo el mundo. Adoro que la gente se quiera.

Vida

Y comprender que no existe la sumisión, que esa palabra es un gesto, una vocación, es una mezcla de amor paciencia y empatia. Que el amor de basa en la confianza y en el saber estar, en el respeto de pensamientos y actitudes , en los lloros. Que la vida esta para experimentarla, para comértela, y se que cada kilo de alegría al día, cada dosis de cuidados intensivos de caricias es necesario, aunque sea hacia ti o hacia el de al lado, pero si algo se es que hoy por hoy te quieren si tu quieres más. A mi por suerte o desgracia me gusta querer más.

Ojalá mi padre.

Ojalá me hubieras abandonado,
ojalá te hubieran raptado,
ojalá fuera adoptada por tu parte,
ojalá yo viendo muertos.
Ojalá yo siempre contigo,
ojalá no duela,
ojalá no te sintiera,
ojalá tu,
Y ojalá que después de todo aparecieras buscándome.
Ojalá nosotros.

Lo tengo todo, te tengo a ti.

Hoy después de casi tres años, cayendo y levantando, sufriendo y rabiando de felicidad, aprendiendo, besando, amando, rabiando, enfadando, después de todo lo vivido amor, sólo nos queda nosotros. Nos queda esperar, correr, nos espera llorar de alegría y por supuesto ahora amor nos queda ser más felices de lo que somos, por que sí porque nos lo merecemos, porque tenemos el mundo aún estando separados, porque la luna cuando nos enfadamos se esconde para llorar. Te quiero porque he aprendido que sólo cuando nos reímos se alumbran millones de estrellas más y me das diez años de vida cada vez que me dices un te quiero. Decirte también que no hay nada después de ti, bueno si nuestros hijos. Decirte que verte sonreír o bostezar o simplemente revolverte en la cama me hace sentir la chica más feliz del mundo. Por que lo tengo todo, por que te tengo a ti. 

'última'

Las palabras última o último, cuanto daño hacen y cuantas veces utilizamos esa palabra sin saber el destrozo o el arreglo que va a causar. Cuántas veces me he acordado de tu última llamada, de tu última palabra, de tu último viaje, de tu último beso... Me acuerdo de nuestro último baile y del último paseo. También de la última excursión. Y no se por que siempre recordamos las últimas cosas quizás es por que marca un antes y un después en un aspecto de la vida. Pero querido. Esto no pasa... Y en el único contexto que jamás podré poner 'última'  será en 'esta es la última vez que te escribo' o ' esta es la última vez que te lloro', nunca podré dejar de escribirte y decirte cuanta falta nos haces y que después de todo mi mundo ahora va a peor. No sabes lo que es estar esperando o añorando una llamada que te diga "chiquitita" o escuchar por casa las zapatillas arrastras de caminar. No sabes tampoco el eco y el vacío que provocó tu pérdida en nuestros corazones. El cúmulo de emociones, el no saber, el no estar aquí aún estando. No imaginas lo imposible que veo ahora el no volver a verte. Eso de que el tiempo lo cura todo no es verdad, las heridas siguen sangrando y según que día derrama más o menos, pero duele igual. Y que pena haberte tenido y ahora tener que dejar de acostumbrarme a tus pasos. Tendré que dejar de imaginarme tu aspecto, dejar de imaginar tu sonrisa, dejar de imaginar tus palabras de apoyo, y tener que dejar de imaginar que sigues cuidándome. Pero lo que nunca dejaré de hacer será quererte y recordarte. Porque yo papá vivo de tus recuerdos y los necesito para quererme.

Papel y boli.

Despúes de tantas letras dedicadas, de tantas palabras refugiadas en mi mente, hoy sigo enamorada del papel, de la imaginación, del dolor. Abrí mil puertas con tan solo rozar el filo de la hoja, rocé el cielo con cada acento,con cada letra más alta que la otra, volé hasta tener lo que perdí. Y esque la riqueza está en un papel y un lápiz.
Tengo miles de historias, miles de momentos, miles de impuridades, miles de sueños que solo un papel puede darme. Tengo la libertad soleada, tengo miles de celdas donde los barrotes son de caramelo y las camas son las nubes. Tengo un mar infinito dónde no se distingue el cielo del agua. Tengo miles de secretos guardados en las hojas. Tengo un gran confidente, alguien al que contar lo que siento y que siempre me de las respuestas. Encontré la magia en la inspiración.
 He tenido pérdidas, y sólo él supo entenderme y responderme. He tenido lágrimas, y el las ha quitado antes que nadie. He tenido el mundo alrevés, y solo el ha sabido ponerlo. He luchado, he avanzado, he crecido, he aprendido por él y para él. He tenido pocas fuerzas y solo él ha sabido darme el empujón.
Me enampré de la soledad, de caminar y pensar en que escribiría cuando llegara a casa. Me enamoré del papel arrugado, emborronado y sucio. Me enamoré de las historias que escribí. Me enamoré de los bolis acabados, de los folios llenos, de los tachones y las marcas de lágrimas en el papel.
Me perdí en las comas, en los puntos seguidos, en los guiones, en los continuará y en las posdatas.
Morí en cada punto y aparte, en cada historía fallada, en versos que nunca acabé, en los besos que intenté definir y nunca pude.
Y aquí estoy, dispuesta a todo. Me dispongo a tener cientos de vidas en miles de papeles, me dispongo a cambiar, a aprender y a saber más que ayer. Hoy más que nunca aquí estoy, amando y sufriendo. Volando a ras del suelo y en el fondo de lo más alto de mi vida.

Vacío.

Ahora después de tanto, siento que te he perdido y no se el porque ha sido ahora,  a lo mejor es que mi mente ha llegado al límite de quererte,  de echarte de menos. Quizás todo esto de sentirte haya acabado. Sabes... Aun sigo escuchandote, sigo queriéndote. Y es que no se como recordarte, se que estuviste y estarás,  pero llevo tres años sin verte,  sin poder tocarte, sin poder escucharte y sin poder Reírte y aún que   lea, te piense, intente sentirte,  e intente buscarte no te encuentro. Sabes, he aprendido a buscarte en rincones, en palabras,  en los minutos, te he encontrado a solas,  y cuando te necesité. Te encuentro ahora, escuchando mi corazón que esta
dedicado para ti. Te encuentro en fotos, en miradas, en detalles y en palabras.... Querido padre yo a ti te busco hasta en el infinito. No pienso que seas ni la Osa Mayor ni el mismísimo Sol, creo que eres insuperable, que eres incomparable y que una estrella por mayor que sea nunca serás tú, yo se que eres todas. Y papá que te echo de menos y buf me quedo corta, quizá debería interpretarlo con onomatopeyas, con ruidos, con sonidos,  con gemidos de lamento... Pero tu ausencia no se puede describir ni con los gritos de mi alma. Solo tengo las lágrimas.

Ausencia

Y ahora después de tres años me cuesta acordarme de lo que era tu presencia. Siento cada vez que pienso en ti como mi mundo se va a otro lado lleno de polvo estelar de todos loa colores, me hace cerrar los ojos e intentar conseguir sentir alguna caricia, tu peso sobre alguna parte de mi cuerpo, algún tono de voz de tu garganta, pero siempre me quedo a medias, nunca consigo llegar a notar algo, pero si a sentirlo como nunca en tu presencia lo había echo.
Tu ausencia cada vez es más de locos,  empiezo a sentirme inútil echando de menos algo que no va a volver, pero tal vez no lo soy porque se que desde alguna manera tu llevas mi corazón y existen estas letras por ti. También decir de tu ausencia que no es fácil pero es indefinible, nunca he sabido como explicar lo que me falta. No es como si faltara un dedo, no es como si te dejara tu pareja o suspendieras el examen de tu vida, no, es mucho peor. Es la falta, la ausencia de algo probado, algo tenido, algo valorado y algo querido, es como una puñaladita cada mañana que despierto y no escucho tu voz, como bajar un escalón y sin darte cuenta te tiras a un precipicio cada vez que espero verte, como saber que puedes volar y no sabes, eso siento yo papá que te tengo pero no se de que forma o manera. Se que te fuiste allí al primer cielo y espero que tengas paciencia y me esperes y sino te buscaré en todos los cielos. Decirte que tu ausencia es superación y valor todos los días. Decirte también que no me ha ido tan mal eligiendo los caminos equivocados pero podría haber ido mejor  y de esto he sacado la conclusión de que hay más de dos y de tres caminos y que eso solo depende de como des los pasos.  Tu ausencia, es amor.

Hablando con la luna

Hace tiempo que hablo con la luna, y ella siempre me dijo que tu voz sería tan sensible y suabe al pronunciar mi nombre como los ángeles que bajan a cuidar los sueños de las personas. Me comentó que tus caricias me harían sufrir condena por esperar a la siguiente, como ella espera 12 horas por ver el Sol unos instantes. Me dijo que despues de ti tendría un motivo por el que despertar. Me contó que después de ver tu sonrisa, los cuentos de hadas y el  infinito me iba a parecer cortos.Que después de amanecer a tu lado no necesitaría nada más que rozar tu piel en cada movimiento somñolento. Que verte sería un placer y conocerte una bendición.  Pero yo no tuve otra respuesta que llamarle mentirosa. Se quedaba corta con todo lo que me había dicho, cuando te ví, mi vida se paró. En unos segundos fui capaz de imaginarme mil vidas a tu lado de todas las formas, maneras, y con todo tipo de detalles. Cuando me hablaste, mi cuerpecillo empezó a saltar, a brotar como lo hacen las flores en primavera. Fue cuando me rozaste, donde comprendí que existía esa persona que verdaderamente me iba a hacer volar, me creí todos esos cuentos de vivir felices y comer perdices, porque hay siempres de un instante y de toda una vida, y cada vez que tú me rozas es un instante que siempre me provoca la misma reacción que me provocaba hace tiempo. Se equivocaba la Luna, tu eres mucho más que alguien, eres más que cualquier estrella, que cualquier divinidad, eres totalmente indefinible. Totalmente perfecto

Estamos a cinco días de tu gran día, y yo ya noto como te necesito grandullón. Duraste poco conmigo pero nuestra breve historia la leeré mil veces antes de dormir, porque sin saberlo te necesitaba y ya no estas. Admito que cada vez es mas fácil seguir avanzando sin ti... Ya no soy esa niña a la que le falto su padre con 15 años y digamos que estoy aprendiendo a vivir. Gracias por ser quien eres y siempre serás. Mi padre. Siempre tu. Porque que quieres que te diga ya después de tres años con tu ausencia. Es inútil todo ésto, yo te escribo pero tu nunca me leerás pero me conformo con decirte que te quiero y aunque loa recuerdos cada vez sirvan de menos yo siempre voy a llevarte en mi corazón. O tu llevarás mi corazón. Quien sabe.
Feliz casi nunca cumpleaños . Te quise, te quiero y te querré toda mi vida papá.